Durante los últimos días de agosto y el mes de septiembre, decidimos acometer la situación de semipresencialidad que se planteó desde la Consejería de Educación, de forma que nuestros alumnos pudieran asistir a clase de la manera más eficaz y lo más cernana posible a la presencialidad completa. Dedicamos mucho esfuerzo, tiempo y presupuesto a dotar todas las aulas de pantalla, proyector, sistema de sonido y cámaras web.
Lo primero ya estaba en la mayor parte de las instalaciones, pero las cámaras web fueron una fuerte apuesta por una enseñanza de calidad, en la que la semipresencialidad o las posibles cuarentenas de los alumnos se notaran lo menos posible.
Todo el claustro se involucró en crear Aulas Virtuales en todas las materias, para que los contenidos fueran accesibles desde casa. Pero, sin duda alguna, lo más valioso ha sido el empeño de todos en hacer llegar las clases a todas las casas, con el fin de que el no asistir presencialmente al instituto, tuviera el menor impacto.
También ha sido necesaria (y mucho) la paciencia de profesores, alumnos y familias, ya que la tecnología no funciona siempre como quisiéramos.
¡Muchas gracias a todos!
_______